jueves, 13 de abril de 2017

Sobre el artículo de Ángel Felpeto

Buenas tardes compañeras y compañeros:

Transcribo a continuación la reflexión que se nos solicitaba sobre el artículo de Ángel Felpeto.

Aunque ya lo habéis dicho prácticamente todo, intentaré realizar, sin cansar, mi pequeña aportación.
Vaya mi consideración previa de que, como paisano en Toledo de Ángel Felpeto, es una persona a la que tengo mucho respeto y que se ha ganado el mismo no por lo que dice, generalmente de forma muy acertada, sino por lo que hace. Y es alguien que ha desempeñado muchas labores e importantes en el mundo de la educación.
Quiero destacar en primer lugar que, a pesar de ser un artículo de hace más de trece años, sigue teniendo plena vigencia o casi. Eso ya me parece motivo de reflexión. ¿No aprendemos de la experiencia? ¿No somos capaces de corregir aspectos que ya hace tanto tiempo que están diagnosticados?
Ciñéndome al artículo, estoy muy de acuerdo, tal como otros compañeros habéis escrito ya,  en su consideración de que
“De una buena dirección y gestión de un centro depende la calidad de la enseñanza que imparte, del servicio educativo que presta”.
Pero también pienso que no todo el peso debe recaer en la figura del director, pues por más que nos empeñemos su labor sola no basta, debe ser un trabajo del equipo directivo y de toda la Comunidad Escolar, especialmente del Claustro de Profesores.
Por supuesto que es labor principal del director y su equipo dinamizar ese claustro, pero es en este punto donde quiero una idea por si sirve para contrastar opiniones. Es la siguiente:
Todos elogiamos y planteamos siempre a nuestros alumnos la necesidad de trabajar en grupo, de realizar actividades cooperativas en las que prime el interés general sobre el particular, de la necesidad de trabajar de forma cooperativa y con la aportación de todos, etc. etc. etc.
Como dije al referirme a la figura de Ángel Felpeto, me merece muchísima más consideración lo que las personas hacen que lo que dicen, así pues la pregunta es ¿Hacemos como claustro y ponemos en práctica eso mismo que pedimos a los alumnos? Si no es así, es muy complicado que ningún director/a, sea del estilo sea, pueda llevar adelante ningún proyecto. Y mi impresión es que en muchas ocasiones anteponemos nuestros intereses personales a los del grupo, a los del centro. Todos debemos remar en la misma dirección, aunque a veces no sea exactamente la que a nosotros nos gustaría, pero siempre será mejor que hacerlo en direcciones distintas, y no digamos nada si son opuestas. Es un desperdicio de energía bastante inútil que nos acaba quemando.
Me ha parecido también interesante la parte en la que expone las dificultades para que se renueven los equipos y haya candidaturas. Coincido en muchas de ellas, pero lo que me parece provechoso es que pueden servir, y mucho, sobre todo las que se refieren a elementos internos de un centro y relaciones del profesorado, como orientación sobre que aspectos debemos cuidar para que nuestro proyecto sea factible.
Soy partidario también "de un modelo basado en la participación de la comunidad educativa. Modelo democrático basado en un proyecto de trabajo sustentado por un equipo de personas y refrendado por un órgano de participación como es el Consejo Escolar."
En relación con esto creo que es de vital importancia que el equipo directivo sea eso, un verdadero equipo, sin fisuras de cara al exterior, y que cuando haya una diferencia de opiniones se resuelva en el seno del mismo antes de mostrar esa, para mí debilidad, ante el resto del claustro.
A pesar de todo, y aunque estemos en la obligación de escuchar a todo el mundo, no debemos olvidar que somos nosotros quienes tendremos que tomar las decisiones y asumirlas. Mucho mejor si son consensuadas por todos o al menos la mayor parte.
Por no extenderme más, y si tuviese que quedarme con lo esencial del artículo para tener en cuenta a la hora de ejercer un modelo de liderazgo en la dirección de un centro educativo, este sería:
"un liderazgo integral que centra su preocupación en el rendimiento escolar de los alumnos (liderazgo pedagógico), en una buena gestión de los recursos y de los servicios(liderazgo de gestión eficaz) y en la creación de un clima de trabajo agradable y de relaciones humanas fluidas (liderazgo de grupo).
Y, por supuesto, "No entiendo la dirección de un centro carente de plena dedicación".

Un saludo a todos.

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